UNA OBRA DE EDUCACIÓN NO FORMAL
Las Escuelas de Tareas Calasanz (ETC) son una obra de educación no formal, que los Escolapios de las Californias llevamos adelante en nuestras comunidades de México, gracias a la imprescindible colaboración de un importante número de voluntarios, que se transforman en maestros y a los aportes económicos de fundaciones y personas, que apoyan esta obra educativa.
Nacen como respuesta a una serie de factores socio-culturales, que trastornan el pleno desarrollo de la educación de nuestros niños, en particular, de los de familias de escasos recursos. Ayudar a hacer la tarea a los niños de primaria es entonces parte del objetivo de la ETC, pero no es el único objetivo.
Una Escuela de Tareas Calasanz es una herramienta educativa para que los niños y los jóvenes y adultos voluntarios, que ejercen como maestros, puedan mejorar su instrucción, puedan desarrollar sus cualidades humanas y así puedan desarrollarse mejor como personas, culminar con éxito los estudios oficiales, y mejorar su relación con la familia y el vecindario.
La Escuela de Tareas Calasanz es un proyecto comunitario, abierto a todas las personas, sin importar su credo religioso.
NUESTRAS ETC
El número de ETC y de niñas y niños atendidos varía anualmente, de acuerdo al apoyo humano y material, que recibe esta obra educativa. Sin embargo, desde la creación de la primera, en Mexicali, en 1998, las ETC han crecido en número, cantidad de niños y colaboradores, impacto socio-educativo y actividades y también, han cobrado presencia en Ensenada, en Tijuana.
MODELO EDUCATIVO
El modelo educativo de las ESCUELAS DE TAREAS CALASANZ es cristiano, pues se basa en los ideales de Jesús de Nazaret -atención al más pobre para que viva con dignidad- y es escolapio, porque está inspirado en la obra y en la pedagogía de José de Calasanz, educador y patrono de la Escuela Gratuita para pobres. Pero además es respetuoso, porque acepta y respeta niños, maestros y padres de familia de diversas clases sociales, ideologías políticas y credos religiosos.
Se caracteriza por ser humanista, transformador y replicable, pues fácilmente puede ser desarrollado en diferentes lugares y condiciones. Es preventivo, esperanzador, abierto, integrador, solidario, económico y de carácter no formal y de tiempo libre.
Los maestros buscan propiciar para sí mismos y para los niños y niñas valores tales como la amistad, la alegría, la tolerancia y la paciencia, la solidaridad, la igualdad, la verdad, el aprendizaje, el placer, la confianza y la integración familiar.
Para instrumentar el ideal de educación, que visualizamos, en las ETC estimulamos la formación y el intercambio continuo, la promoción de la acción de gracias y la inclusión social, religiosa y cultural; promovemos la gratuidad, el disfrute en el proceso de enseñanza y de aprendizaje y el reforzamiento escolar; y favorecemos una afectividad sana y la experiencia del servicio a los demás.